¿Sabía que las aguas residuales se pueden tratar con ozono y luz ultravioleta?

Tras un trabajo de investigación, desarrollo e implementación de un año, el Laboratorio Vitalis puso en marcha su planta de tratamiento de aguas residuales. Esta funciona bajo un nuevo protocolo de desarrollo propio, resultado de un estudio científico, inicialmente formulado en asocio con  la Facultad de Ingeniería Ambiental de la Universidad Libre de Colombia, y luego implementado de la mano de una importante empresa de ingeniería y soluciones técnicas, logrando en este tiempo, perfeccionar el proyecto y poner en marcha el nuevo proceso que hoy ya se encuentra en pleno funcionamiento. 

Esta innovación técnica consiste en el empleo de ozono y luz ultravioleta, que en conjunto tienen la capacidad de reducir las partículas contaminantes del agua residual con el fin de degradar las trazas de compuestos químicos generados durante las diferentes  etapas de producción y envase de los medicamentos comercializados por la compañía. 

Según Karina Pérez, Líder de Salud, seguridad y medio ambiente de Vitalis, “nuestro aporte marca un avance en la metodología para descontaminar las aguas residuales, al punto de lograr una importante degradación de trazas de medicamentos. A través de esta, logramos romper las moléculas de muchos compuestos químicos presentes en el agua residual y, además, con el sistema de tratamiento completo que hemos implementado, logramos eliminar otros contaminantes fisicoquímicos y microbiológicos presentes en los vertimientos, con una eficiencia del 90%. 

Gracias a este trabajo científico y técnico, el laboratorio Vitalis aporta al sector farmacéutico demostrando desde su complejo industrial de Sopó que sí es posible la eliminación de organismos microscópicos resultantes de procesos de mutación del ADN que se dan en presencia de algunos medicamentos.

“A partir de la operación de nuestra nueva planta de tratamiento también se logró una reducción en el consumo de agua y energía en un 10%. Esto responde al propósito de la compañía por actuar responsablemente con su entorno, alineados con la resolución 1256 de noviembre de 2021por la cual se reglamenta el uso de las aguas residuales”, asegura Karina Pérez.

Y concluye agregando que “igualmente, luego del éxito de nuestra innovación, y apoyados en más estudios científicos, evaluamos la posibilidad de implementar un anillo para la recirculación del agua,  en el cual se puedan incluir otros efluentes, como por ejemplo el agua de rechazo del proceso de ósmosis inversa para el suministro de agua para medicamentos inyectables”.

Temas:

Facebook
Twitter
WhatsApp
Telegram
Email
Print