“Mi gran pasión es operar, me dedico 100 por ciento a mis pacientes, tanto así que en muchas oportunidades no tengo tiempo para mi vida personal. Tengo muchas pacientes de Chile y Argentina por eso decidí abrir consultorio en Santiago, próximamente en España”, contó Edwin Arrieta Arteaga en un reportaje publicado en Revista Hola Colombia en diciembre de 2022.
A la pregunta: “¿Qué viene para el 2023?” contestó:
“Aparte de expandir mi consultorio en España, se viene un proyecto gastronómico, que es otra de mis pasiones. He dejado atrás un poco el polo, mi deporte favorito, porque la mayor parte de mis días se la dedico a mis pacientes”. Esta fue la última entrevista que ofreció Edwin, el médico de Lorica asesinado y desmembrado en Bangkok.
A Edwin le gustaba la cocina, sobre todo los postres, incluso alcanzó a impulsar en redes su “flan del cirujano”, una receta “deliciosa con más de 100 años de tradición”. Esto puede explicar por qué conectó tan bien al principio con el asesino Daniel Sancho, chef de profesión y empresario restaurantero.
Su pasión, operar
Edwin Miguel Arrieta Arteaga egresó como Médico Cirujano de la Universidad Metropolitana de Barranquilla (UNIMETRO) y estudió la Especialidad en Cirugía Plástica, Estética y Reconstructiva en la Universidad de Buenos Aires (UBA) en Argentina.
Edwin operaba de forma natural; era especialista en reconstrucción abdominal, marcación abdominal y lipoescultura; él mismo llamaba a su técnica “el estilo Arrieta”.
Su don de gentes lo convertía en ese amigo que todos recuerdan con amabilidad. “(Daniel Sancho) Está ensuciando el nombre de mi hermano, quien no se puede defender”, dijo entre lágrimas Darling Arrieta, hermana del médico, durante una entrevista a Caracol Noticias. Y es que Sancho ha dicho que “Edwin lo tenía en una jaula de cristal” y que lo quería obligar a tener una relación sentimental.
El medio tailandés Bankok Post escribió que Sancho “habría estado bastante relajado en el momento del interrogatorio” y cuando finalmente confesó el crimen.
Edwin Arrieta Arteaga era reconocido por hacer obras de caridad, por su amabilidad y por ser un hijo, hermano y amigo ejemplar. Entre sus títulos está ser miembro de la Sociedad Colombiana de Cirugía Plástica y reconstructiva de Colombia y Chile.
En una entrevista con EFE, Daniel Sancho confirmó que se había declarado culpable porque “había muchas pruebas y bastante claras” en su contra.