La Sociedad Colombiana de Cirugía Plástica, Estética y Reconstructiva (SCCP) reconoce como un avance en salud pública la expedición de la Ley 2316, que regula y sanciona el uso de biopolímeros en los procedimientos estéticos, crea el tipo penal por lesiones personales con estas sustancias y establece medidas a favor de los ciudadanos, así como fomenta estrategias preventivas y educativas.
“Consideramos que esta regulación referente a los biopolímeros va a permitir el control de un problema que impacta a hombres y mujeres en Colombia y que se había convertido en un problema de salud pública.
Estamos listos para trabajar conjuntamente con el Ministerio de Salud y el Invima para generar lo que la ley solicita de la manera más acertada y adecuada, desde lo profesional y gremial.
“En ese trabajo en conjunto, estamos atentos a conocer, en primer lugar, cómo se van a definir las sustancias autorizadas y, en segundo lugar, acompañar al Ministerio de Salud en la elaboración del listado de médicos e instituciones autorizadas para el uso de estas sustancias permitidas.
“Finalmente, si bien reconocemos esta Ley como un avance en salud pública, reiteramos la necesidad de reglamentar el ejercicio de las especialidades médico-quirúrgicas con fines estéticos”, añade la SCCP, Sociedad Colombiana de Cirugía Plástica Estética y Reconstructiva.