La industria papelera de Colombia creció un 14, 2 por ciento en su PIB 2022 y se encaminó a la gestión eficiente del consumo de recursos usados en la fabricación de papel durante la última década.
En medio de todas sus acciones encaminadas a la gestión eficiente de los recursos, las empresas papeleras han realizado inversiones para la reutilización y recirculación del agua en el proceso, en sistemas de tratamiento de aguas de residuales, con el fin de poner especial atención en el manejo del agua a través de las diferentes etapas del ciclo de fabricación de la pulpa, el papel y el cartón, proceso en el que solo el 6% del agua captada se consume a través de la evaporación en el secado del papel.
Isabel Cristina Riveros, directora ejecutiva de la Cámara de la Industria de Pulpa, Papel y Cartón de la ANDI, asegura que “los vertimientos de agua en la última década se han reducido 8.1%. Esta cifra respalda el compromiso de las empresas afiliadas a la Cámara, que reúne al 100% de las que producen pulpa para papel y papeles para imprenta y escritura, 68% de las que producen papeles suaves y 88% de las productoras de papeles para empaque en el país”.
En cuanto a la captación, el compromiso de la industria papelera es evidente a partir de 2010 cuando captaba 37.7metros cúbicos por tonelada producida (m3/t) y que en 2020 logró llegar a 32.1 m3/t.
Ya para el 2020 y en lo sucesivo, esta industria también ha elevado los estándares e indicadores del tratamientos de sus vertidos, y revela que un 100% de las empresas de este sector realizan procesos primarios y secundarios de tratamiento a través de los cuales logran que los parámetros físicos y químicos en promedio sean muy inferiores a los parámetros establecidos por la reglamentación nacional.
En materia de vertimientos, la industria también reporta cambios en la gestión eficiente en los resultados de su monitoreo de indicadores a partir de 2010 cuando vertía 36m3/t producida pasando a 33 m3/t en 2011 y a 30 m3/t en 2020.
El agua es parte fundamental de nuestro proceso productivo como lo es para el entorno, ello ha impulsado a las empresas papeleras a incluir el uso racional de este recurso en su ADN, a través del uso eficiente con la recirculación que le permite reciclar más del 80% del agua captada.
Así mismo los procesos de tratamiento aerobios y anaerobios han permitido devolver a los cuerpos de agua menor cantidad de carga orgánica. Los resultados evidencian menor captación de agua y vertidos cada vez más limpios, los cuales obligan a las empresas a continuar monitoreando las mejores prácticas para seguir aportando resultados positivos en la gestión eficiente de este recurso.