El Hospital Infantil Universitario de San José hace un llamado a padres y cuidadores sobre la importancia de la detección temprana y el manejo adecuado de las alergias alimentarias en la población infantil. Entender cómo y cuándo introducir nuevos alimentos, así como saber diferenciar entre una alergia y una intolerancia, es fundamental para garantizar el bienestar de los más pequeños.
Para diferenciar una alergia alimentaria de una intolerancia, se puede observar la presencia de síntomas cutáneos o respiratorios, la severidad y extensión de las lesiones, los signos respiratorios y/o gastrointestinales, y la inmediatez con que aparecen los síntomas después de consumir el alimento (minutos, horas, días).
Mientras las alergias alimentarias son una respuesta del sistema inmunológico que puede llegar a ser grave, las intolerancias suelen implicar problemas digestivos menos severos, pero que también requieren atención adecuada.
Según datos de la Organización Mundial de la Alergia (WAO), entre el 6 % y el 8 % de los niños menores de 3 años en el mundo sufren de alguna alergia alimentaria, y su prevalencia ha aumentado en las últimas décadas. La Academia Americana de Alergia, Asma e Inmunología (AAAAI) estima que mundialmente 1 de cada 13 niños vive con al menos una alergia alimentaria diagnosticada, provocadas comúnmente por leche, huevo, maní, nueces, trigo, soja, pescado y mariscos.
Recomendaciones para la introducción de alimentos en niños
Una introducción cuidadosa y paulatina de nuevos alimentos es clave para identificar posibles alergias. Los expertos del Hospital Infantil Universitario de San José recomiendan:
Para evitar el desarrollo de alergias alimentarias en niños desde etapas tempranas, se recomienda:
“Las alergias alimentarias pueden representar un riesgo grave para la salud e incluso ser potencialmente mortales; por ello, es fundamental no solo implementar medidas preventivas, sino también acudir de manera oportuna al especialista ante cualquier sospecha”, concluye la Doctora María Ortega, Alergóloga del Hospital Infantil Universitario San José.
Se debe acudir al pediatra o alergólogo si se sospecha una alergia alimentaria, especialmente si se presentan síntomas graves o persistentes, para iniciar estudios. Entretanto, se debe suspender el alimento del cual se sospecha es el que produce la reacción alérgica.