En medio del creciente desafío del calentamiento global, es fundamental recordar que nuestra piel es una barrera esencial contra los efectos nocivos del sol. El skincare, más allá de ser una práctica de belleza, se convierte en una medida crucial para prevenir enfermedades y proteger nuestra salud en un mundo donde el cambio climático nos tiene en jaque.
Según Michelle Rojas, experta en producto de O Boticário, los principales retos se enfrentan con el cuidado de la piel, radican en 5 factores:
● Escoger los productos adecuados y específicos para tú piel.
● Usar los activos específicos -aquellos ingredientes o componentes que tienen una acción específica sobre la piel, encargados de que un cosmético cumpla con la función para la que está elaborado- Sin embargo, no todos tenemos las mismas necesidades.
● No hacer adecuadamente la limpieza facial: se debe hacer limpieza dos veces al día con los productos apropiados.
● No hidratarse: la hidratación diaria es fundamental, para reforzar la barrera cutánea.
● Y una de las más importantes, olvidar la protección solar, los rayos UV envejecen la piel todo el año y pueden desarrollar enfermedades.
¿Qué es lo adecuado?
El punto de partida para una rutina de Skincare adecuada, es contar con la información específica sobre tu tipo de piel, al respecto, la experta expone que, “es importante visitar al dermatólogo para que estudie tu piel a profundidad y puedas saber cuál es tú necesidad específica, y así poder usar los productos adecuados, ya que no todos funcionan de la misma forma en todas las personas”, afirma Michelle Rojas.
5 hábitos clave para mantener una piel saludable y radiante según Michelle Rojas
1. Protegerse del sol: Cuidar de nuestra piel es mantenerla protegida del sol. El exponernos a este, puede provocar arrugas y manchas de la edad, entre otras. Así como un aumento del riesgo de cáncer de piel.
2. Escoger los jabones adecuados: Evitar los que contienen ingredientes o agentes limpiadores más potentes y concentrados que los jabones comunes, pues pueden ser muy fuertes y eliminar los aceites naturales de la piel. En su lugar, usa limpiadores suaves y que vayan acorde a tus necesidades.
3. Humectar la piel: Si tu piel es seca, te recomendamos usar un humectante que se adapte a tu tipo de piel.
4. Llevar una dieta saludable: Comer frutas, verduras, granos integrales y proteínas magras y el infaltable: beber agua ayuda a mantener la piel hidratada.
5. Hábitos sanos y controlar el estrés: Dormir lo suficiente (entre 6-8 horas, cuando tenemos picos de estrés la piel puede volverse más sensible y se pueden producir brotes de acné y otros problemas cutáneos.
En conclusión, en un mundo afectado por el calentamiento global, el skincare se vuelve más relevante que nunca. Proteger nuestra piel del sol no solo es una cuestión estética, sino también una cuestión de salud pública y medioambiental, es momento de adoptar y reforzar prácticas de skincare responsables y conscientes, porque al cuidar de nuestra piel, también estamos cuidando del planeta que habitamos.
