A Paula, su exnovio D.F. Peralta presuntamente la robó de la peor manera: aprovechando que estaba enamorada.
La joven, que ha denunciado el caso en redes sociales, explica que este sujetó le hizo creer que padecía Leucemia, para que ella le colaborara con unos exámenes médicos que costaban 1 millón 300 mil pesos colombianos. Eso no fue todo; también le dijo que le regalaría una especialización en una buena universidad, pero que ella debía pagar $500 mil que exigían de un curso de inglés para acceder a dicha especialización.
Las mentiras siguieron, y por ende la manipulación y la violencia financiera que este chico ejerció sobre Paula.
“Me utilizó para que le entregara $500 mil para unos supuestos viajes de trabajo (…) nunca estuvo laborando”, continúa Paula.
Este tipo de violencia está extendida en el mundo como “estafa de romance” y tal como analiza un artículo de Psicología Hoy de la doctora Pamela Rutledge, Directora del Media Psychology Research Center y profesora de psicología de medios en la Universidad de Posgrado de Fielding Graduate, “La evidencia puede ser esquiva. Los esfuerzos de las autoridades a menudo se ven obstaculizados por la vacilación de las víctimas para hablar debido a la negación, la vergüenza, las amenazas del perpetrador y el miedo al ridículo, además (punto importante) que suelen culpar a las víctimas y esto es frecuente en las redes sociales”.
Las víctimas viven la desilusión de un amor que las llevó a endeudarse, y a la incertidumbre de no saber cómo recuperar su dinero, que fue entregado al estafador sin presiones, por manipulación.
Psicología del estafador
Los estafadores suelen ser personas antisociales, cuyas características debemos reconocer.
La experta en Psicología de la Delincuencia María Jesús Lopez Latorre de la Universidad de Salamanca, afirma que “El adulto antisocial generalmente falla en mantener relaciones íntimas con otras personas. Su desarrollo laboral es deficiente, está involucrado en conductas ilegales, tiende a cambiar sus planes impulsivamente y pierde el control en respuesta a pequeñas frustraciones”.
Ojo padres porque estas personas muestran ciertas características desde que son niños. Es así como “se muestran intranquilos, impulsivos, sin sentimientos de culpa, funcionan mal en la escuela, se fugan de casa, son crueles con los animales y cometen actos delictivos”, reitera la doctora Lopez.
Algunas de las características de este tipo de personas es que:
- A menudo mienten para obtener favores o bienes y evitar obligaciones.
- Ha robado objetos de cierto valor sin enfrentamientos con la víctima.
- Ha violentado la casa de otras personas sin remordimiento.
En el caso de Paula, el escarnio público en redes sociales fue la alternativa que escogió para exponer a su expareja pues sabe que será casi imposible recuperar su dinero. Esto nos recuerda al ”Estafador de Tinder” que hoy día tiene a sus víctimas endeudadas.
