Las causas por las que algunas personas tienen “dedo en gatillo”

Las manos son maravillas mecánicas con poleas que, en forma de tendones, se flexionan y extienden para abrir y cerrar el puño, y estirar y doblar los dedos. Cada tendón está envuelto en una película que lo mantiene en su lugar. A veces, el tendón puede irritarse e inflamarse, lo que impide que se deslice con suavidad debajo de la vaina. Cuando eso sucede, el dedo o el pulgar pueden atascarse y quedar en una posición doblada o recta, una afección que se denomina dedo en gatillo.

Especialistas en ortopedia de la Clínica Mayo indican que por lo general, las personas de 45 años o más y aquellas que tienen diabetes o artritis reumatoide pueden tener más posibilidades de padecer el dedo en gatillo. Es poco frecuente en niños. Generalmente, la vaina del tendón se irrita debido al exceso de trabajo o a una lesión, por lo que las personas que realizan movimientos repetitivos oprimen mucho o levantan cargas pesadas en su trabajo, pueden ser propensas a padecer esta afección. Puede suceder en cualquier momento y es más común de lo que las personas piensan.

¿Cómo se trata?

Cuando los síntomas son leves, como un bulto pequeño y doloroso en la base de un dedo o el pulgar del lado de la palma de la mano, pero puede estirar o doblar el dedo sin que se trabe, se recetan medicamentos antiinflamatorios. Si el dedo o pulgar se traba, puede aplicar una presión suave para forzarlo a estirarse o doblarse.

Si el dedo o pulgar se traba, no puede forzarlo a estirarse o doblarse y siente que se atasca o hace un chasquido, el próximo nivel de tratamiento es una inyección con esteroides para calmar la irritación y la inflamación. La inyección se administra en la palma de la mano en una clínica. Se utiliza un espray frío para adormecer el área.

Una inyección puede aliviar el problema, pero puede volver a ocurrir. Si esto sucede, se puede administrar otra inyección después de tres meses.

Un tratamiento no quirúrgico menos común es la ferulización. Por la noche, se utiliza una férula para mantener derechos el dedo o el pulgar afectados.

¿Es la cirugía una opción?

Los especialistas de Clínica Mayo indican que cuando los medicamentos y las inyecciones con esteroides no son efectivos, es posible que necesite una cirugía, que es un procedimiento rápido que se realiza en el mismo día. Se realiza una pequeña incisión en la palma, por lo general a lo largo del pliegue para que la cicatriz sea menos evidente. El cirujano sondea debajo de la piel para aflojar la adherencia.

Puede irse a casa el mismo día, aunque, mientras sana, tendrá un uso limitado de la mano operada durante 10 a 14 días. Podrá vestirse, conducir, comer y hacer otras actividades ligeras, y deberá asegurarse de no levantar nada que pese más de 7 kg.

Después de aproximadamente 10 a 14 días, regresará a la clínica donde le quitarán el vendaje y los puntos. La mayoría de las personas pueden volver a trabajar sin restricciones y rara vez necesitan fisioterapia de seguimiento.

¿Se puede evitar el dedo en gatillo?

La concientización es la primera línea de prevención. Si nota un bulto pequeño y doloroso en la base del pulgar o dedo, o si siente que se atascan o hacen un chasquido, es posible que deba consultar a un profesional ortopédico de atención médica.

Temas:

Facebook
Twitter
WhatsApp
Telegram
Email
Print